El mundo se enfrenta a dos problemas, el primero de carácter demógrafico y el segundo económico. En el primer caso, se observa un marcado incremento en la esperanza de vida de la población y un achatamiento de la piramide poblacional (crece la participación de individuos de edad madura); en el segundo caso, los países enfrentan un problema de sostenibilidad fiscal en función de los mayores recursos que los sistemas de jubilación basados en el régimen de reparto requieren y demandarán en el futuro.
Frente a ello se ensayan diversas hipótesis: aumentar la edad jubilatoria, complementar los sistemas públicos de reparto con sistemas individuales de capitalización, etc.
En este contexto, se analiza la experiencia de América Latina con el Sistema de Capitalización Individual y la reciente decisión de Argentina de eliminar dicho sistema y volver al régimen de reparto. Se considera en particular el desempeño del Regimen de Garantía de Sustentabilidad creado en 2007, para administrar los fondos del anterior régimen.
